Lenguaje Subliminal

Lenguaje Subliminal: Una trampa evidente para los consumidores

Ángela  Bonilla

El lenguaje subliminal es lo que más se pudo apreciar en el filme que presentaba este contenido en la mayoría de las informaciones que muchas veces observamos y no las percibimos, pero que quedan registradas en nuestro inconsciente .Los mensajes ocultos en la televisión, lo que transmiten  las canciones de nuestros artistas favoritos y la publicidad que lanzan las grandes compañías de bebidas y alimentos, son algunos de los elementos que inducen al ser humano a ser parte del consumismo que a diario enfrentamos.

La publicidad subliminal no es percibida conscientemente. Ha sido estudiada por sociólogos, psicólogos y publicistas. Manifiesta una tendencia a inducir a los receptores-consumidores a prácticas sexuales o todo lo que esté vinculado con el sexo. Pero no sólo se limitan a este aspecto, sino que pretenden influir en la conducta de las personas para que adquieran determinado producto. Para ello, ponen en marcha  muchos mecanismos que los emplean astutamente, como el de insertar la imagen de Coca Cola en un video corto en un lapso de milésimas de segundos.

Definitivamente que quienes están detrás de esos mensajes son personas hábiles que tratan desesperadamente de insertar en nuestra memoria -a modo de chip- determinadas imágenes o figuras que influirán inconscientemente en nuestro comportamiento y modus vivendi , cosa que no podemos evitar porque a veces no las percibimos y nuestro oído y vista están desprotegidos ante esta situación

En los anuncios que hacen referencia a compañías de cervezas y cigarrillos, es donde en gran medida se presentan estos recursos. El ya conocido personaje de la popular marca de cigarrillos Camel de Estados Unidos, evidenció a una nariz con la forma del miembro masculino y una boca simulando la vagina femenina, en conjunto “recreando” el acto sexual.

También, se percibe esta inclusión de información peligrosa y a la que estamos expuestos de igual manera en la marca Pepsi. La lata de la bebida Gilbey`s London Dry, cuya imagen apareció en la edición de la revista Time el 5 de julio de 1971, presenta un relieve de letras en conjunto donde se podía leer la palabra en inglés “sex”, obviamente promoviendo las relaciones sexuales.

Pero, dejando a un lado la publicidad, entran en escena también los grupos de rock, aunque en aquellas décadas no se pudieron identificar los mensajes ocultos, ahora gracias a los avances tecnológicos, hay técnicas computarizadas de retrocesos de canciones. Son programas que se descargan de Internet y que permiten poner al reverso la letra de una canción en formato mp3, donde finalmente se escucha el lado oscuro de la letra. Como es el caso de Inevitable de Shakira y María de Ricky Martin.

En estos casos el mensaje no está tan encaminado al sexo. Se trata de contenidos demoníacos que hablan de espíritus, que pareciera que poseen la voz del cantante. Aquí encaminan inconscientemente al oyente-receptor a prácticas de otra índole, las que tienden a convertirse en satánicas o algo parecido.

Un medio que no puede quedar atrás y que igualmente es un fuerte difusor de mensajes subliminales es la televisión, la que influye en los individuos gracias a su poder visual. Este método se empezó a emplear en las películas, donde las escenas tenían un trasfondo de este tipo.

Actualmente, la pantalla chica está cargada de estas informaciones, ya sea publicidad, telenovelas, películas, noticieros y…dibujos animados!  Es increíble hasta qué punto ha llegado esta mala intención. Walt Disney se ha convertido en uno de los principales culpables-ejecutores que resultan peligrosos ante la vista inofensiva de millones de infantes que aprecian las películas de El rey León, La sirenita y Los rescatadores, entre otros, donde hay figuras e imágenes de pene y aparecen palabra como sex.

Ya para terminar, en la película se nos advertía sobre los  bombardeos subliminales que constantemente estamos sufriendo y que llegan a nuestro inconsciente, donde se quedan y crean una etapa de hipnosis colectiva. Estar alertas e identificarlos para no caer en el juego tramposo que las grandes compañías pretenden imponer, es lo que tenemos que hacer para no cumplir con sus objetivos.